Cómo elaborar un buen plan de empresa
Un plan de empresa es algo necesario e imprescindible dentro del nacimiento de un nuevo proyecto empresarial, y debe ser el origen de la constitución del mismo, porque se encarga de identificar, describir y analizar una oportunidad de negocio. Al mismo tiempo, el plan de empresa examina la viabilidad técnica, económica y financiera a la vez que desarrolla todos los procedimientos y estrategias necesarias para convertir una idea en un proyecto empresarial.
Aunque solamente tengas una idea y no te sientas un profesional aún de tu campo, es importante poner en marcha un proyecto empresarial basado en un plan de empresa, haciendo un estudio mínimo de las oportunidades que pueda generar y de la dimensión que se le quiera dar a un proyecto tan importante. Incluso si tienes una empresa ya establecida, no está de más elaborar un plan de empresa, ya que bien diseñado puede reconducir algún aspecto comercial, productivo, organizativo o financiero. Puede utilizarse también como una base sobre la que levantar más proyectos o diversificar la principal actividad.
Características principales de un buen plan de empresa
Antes de elaborar el plan, es bueno hacerse un autodiagnóstico de aptitudes emprendedoras, valorar las virtudes y las debilidades de nuestra persona en cuanto a capacidades empresariales, descubriremos y afianzaremos las fortalezas y asumiremos los puntos flacos.
El plan de empresa actuará como carta de presentación del nuevo proyecto, por eso es muy importante cuidar la estructura, el vocabulario, el contenido y la presentación, para que sea claro, conciso y directo. La calidad de la información debe ser veraz y comprobable, con datos concretos y evitando las conjeturas basadas en argumentos poco o nada sólidos.
Sin embargo, puede cambiar mucho y puede ser muy diferente en sus formas dependiendo del propósito que persiga, las personas a las que vaya dirigido, y el sector y tipo de actividad a la que pertenezca.
Todo plan de empresa debe contener:
-Actualidad: El plan de empresa debe recoger información y datos actualizados, debe desprender actualidad casi inmediata, ya que algún dato desfasado puede convertirlo en un plan inútil.
-Totalidad: El plan de empresa tiene que describir todas las tareas de la actividad que va a tener o que ya tiene la empresa, con el objetivo de ofrecer una imagen completa y global del proyecto.
-Unidad: Seguramente, el plan vaya dirigido a más de un lector y a más de un colectivo, por eso debe utilizarse un lenguaje flexible y genérico. Ten en cuenta que con toda seguridad lo leerán inversores, bancos, técnicos, proveedores, etc. Si nuestra empresa pertenece al sector tecnológico, será necesario hacer un esfuerzo extra por acercar la terminología a un lenguaje comprensible para todos los sectores.
Estructura del plan de empresa:
1. Datos básicos de la empresa: nombre, domicilio, forma jurídica, sector de actividad.
2. Datos básicos del proyecto: Explicación detallada de la actividad junto con un pequeño estudio de mercado y necesidades a modo de introducción.
3. Financiación: si es propia o ajena, si viene de la mano de inversores, subvenciones, bancos, o de nuestros propios ahorros.
4. Descripción de los productos o servicios: qué es exactamente lo que queremos vender, y de qué forma tenemos pensado hacerlo. A qué público nos dirigimos y qué necesidad estamos satisfaciendo y sobre todo, qué valor estamos aportando a la sociedad.
5. Plan de producción: descripción exhaustiva del proceso productivo, sistemas de control y gestión de calidad, tecnología utilizada, qué instalaciones tenemos disponibles, y en qué proveedores hemos pensado.
6. Análisis de mercado: aspectos generales del sector y viabilidad del producto. Clientes potenciales, análisis de la competencia, debilidades de la empresa, amenazas, fortalezas y oportunidades.
7. Plan de márketing: estrategia de precios, política de ventas, promoción y publicidad, esquema de distribución, servicio post venta y garantía.
8. Organización y personal: equipo directivo y breve descripción de todas las personas que forman o van a formar la plantilla de la empresa.
9. Plan de inversiones: inmovilizado intangible, inmovilizado material, inmovilizado financiero y otras inversiones con las que cuenta o contará en un futuro la empresa.
Elaborar un buen plan de empresa es imprescindible en el proceso de constitución, nos ayudará a aclarar las ideas y hacer el proyecto más viable. Si necesitas ayuda para elaborar tu plan de empresa y crees en el trabajo bien hecho, ponte en contacto con nosotros, estaremos encantados de participar en tu proyecto.